¿PORQUE NOS SENTIMOS HERIDOS POR LOS DEMAS?

Uno de los mayores problemas en las relaciones es la susceptibilidad, ¿el por qué nos sentimos heridos por los demás?... la causa principal deriva de una baja autoestima, porque al no sentirte valioso crees que mereces ser atacado y percibes un mundo amenazante y temible.

Cuando estás inmerso en creer que eres una “victima” en el mundo, es fácil considerarte el centro de todo lo negativo que pueda ocurrir en el planeta... al percibir que todos te atacan o te hieren, te sitúas en un estado egocéntrico cuya característica principal es un trastorno de la personalidad  por evitación que se caracteriza por una hipersensibilidad al rechazo y la humillación que te hace retraerte y evitar el contacto con los demás, a pesar de que lo deseas fervientemente... inclusive se puede llegar a un estado paranoico con manía persecutoria... en donde te sientes perseguido y tiene delirios de que todos los gestos o conductas de los demás son prueba de que intentan dañarte, obviamente son casos extremos.

Sin embargo no se debe menospreciar hasta qué punto con el tiempo puedes llegar...  al sentirte constantemente herido por los demás, por un lado no eres feliz en consecuencia no disfrutas de tus vínculos con los demás porque te es imposible acortar la sensación de separación y dolor que te ancla a un sentimiento de menospreciarte a ti mismo.

El camino a tu propia valoración no es sencillo, porque obviamente mucho de tus temores se han fundado en tu tierna infancia... sin embargo ahora puedes accionar y construir una vida diferente para ti. Lo primero que debes hacer es tomar consciencia de que nada de lo que haga el otro puede causarte un daño real, siendo más empático con el otro puedes comprender sus limitaciones a través de las tuyas, al final cada quien responde desde sus propios dolores y heridas.

Tu puedes transcender tus sentimientos de rechazo, con aceptación y cambiando lo que emites, más para ello tienes que ser consciente de tus actitudes...observa como tú mismo creas tus circunstancias, reflexiona en tu corporalidad, ¿cómo te expresas?... intenta verte desde afuera ¿qué pensarías de ti mismo si te tocara relacionarte contigo mismo? ¿Qué dicen tus gestos? ¿Qué mensajes estás enviando? ¿A quién buscas en tus relaciones?

Es importante que seas capaz de ser empático colocándote en el lugar de los demás e imaginar cómo se sienten ante lo que tu emanas, aprende a salirte de tus rígidos esquemas de pensamiento...viendo la vida a través de los ojos de la confianza.