ACUPUNTURA, MERIDIANOS, YIN-YANG y CHI...
Un
flujo bipolar-llamado Yin,Yang por los Chinos- de impulsos de
energía-información en diferentes frecuencias vibratorias llamado CHI,
entra al Cuerpo Físico procedente de las múltiples dimensiones de una
realidad que cambia dinámicamente.
El
Yin inhibe o detiene los procesos metabólicos, porque es energía
femenina condensante, centrípeta , mientras el Yang que es energía
radiante masculina, centrifuga, los estimula o activa. Estas dos fuerzas
realizan un ciclo dinámico cada 24 horas, a través del cual activan y
detienen distintos procesos en los órganos y sistemas del cuerpo para
mantenerlo sano.
La
polaridad -Yin,Yang- del Chi puede desequilibrarse, puede perder su
perfecto balance debido a diversos factores internos como condiciones
mentales equivocadas basadas en sentimientos negativos, preocupaciones,
hábitos auto destructivos o a conductas instintivas y reactivas. La
polaridad también puede desequilibrarse por factores externos como
alimentación indebida, lugares con miasmas electromagnéticos o
radiaciones, aire o agua contaminada. Cuando el desequilibrio sucede
muchos de los procesos metabólicos necesarios para mantener el organismo
funcionando perfectamente permanecen detenidos, nunca son activados o
por el contrario se activan en exceso.
Los
antiguos sabios Chinos encontraron que se puede restablecer
inmediatamente el equilibrio Yin,Yang usando Acupuntura sobre puntos de
comando de los 14 Meridianos por donde se mueven esas energías yin,
yang, ubicados a flor de piel. Los estimulan con dígito presión, con el
calor químico producido por una sustancia llamada Moxa que se acerca a
esos puntos de comando, con la inserción de agujas, que pueden tener o
no tener una leve corriente eléctrica y por último con luz láser. Todos
esos métodos introducen energía al extremo que le hace falta de la
pareja de opuestos que conforman el Chi, para restablecer el equilibrio.
La Acupuntura restablece la resistencia eléctrica correcta en esos
puntos de comando de los Meridianos sobre la piel y al hacerlo
restablece el equilibrio del Cuerpo Físico con el medio donde se
encuentra y con las circunstancias que experimenta.
El
Chi se mueve a través de 14 Meridianos o arterias energéticas en el
Cuerpo Etérico, que alimentan de energía en distintas frecuencias
vibratorias a los distintos órganos y sistemas en el Cuerpo Físico. 7 de
estas arterias energéticas se encuentran del lado derecho del cuerpo y 7
del lado izquierdo. Los Meridianos con sus puntos de comando a flor de
piel actúan como una red de antenas que capta y emite energía e
información en múltiples frecuencias vibratorias.
Tanto
el sistema de 14 Meridianos, como el sistema de los 7 Chakras o
vórtices energéticos con el que se relaciona se encuentran en el Cuerpo
Etérico o Cuerpo energético, que está compuesto de materia que oscila a
mayor frecuencia que la del Cuerpo Físico, por eso puede ocupar su mismo
espacio pero en la cuarta dimensión no en la tercera. A mayor
frecuencia vibratoria de la energía, menos densa y más sutil es, más
arriba dimensionalmente se encontrará. A menor frecuencia de oscilación,
más densa, condensada y material será la energía. Las más densas
materias son radioactivas.
El
holograma universal esta compuesto por infinidad de frecuencias
superpuestas, cada una contiene una información distinta, mueve procesos
distintos, físicos, etéricos, emocionales, mentales o espirituales.
Todo lo que existe oscila a diferentes frecuencias vibratorias, la
diferencia entre el espíritu y la materia es solo frecuencia vibratoria.
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